En ediciones anteriores se abordaron los procesos logísticos de administración de la demanda, planeación de la producción, planeación de materiales, planeación de la distribución, transporte, almacenamiento y servicio al cliente. En esta edición se abordará algunos procesos asociados al transporte internacional.
Diagnosticar el desempeño logístico de las compañías es tal vez una de las principales funciones de los responsables de las operaciones logísticas, especialmente cuando se tiene una orientación a la mejora continua, a la innovación en los procesos y servicios, a la eficiencia operacional y a la reducción de desperdicios en la cadena de suministro.
El diagnóstico logístico es un asunto sencillo pero poderoso, que consiste en identificar el estado actual de los procesos y los resultados (indicadores), de tal forma que se puedan definir las acciones necesarias que hacen mejorar el desempeño de los procesos.
Tradicionalmente los diagnósticos han sido desarrollados por expertos asesores, quiénes a través de la experiencia y los conocimientos de los procesos logísticos, hacen recomendaciones generales y, en el mejor de los casos, participan en la implementación de sus propias recomendaciones, con un alcance específico tipo proyectos (con un inicio, un fin y unos entregables acordados).
Este artículo es el cuarto de una serie de entregables que busca que los propios responsables del proceso logístico, ya sea de toda la cadena o de un proceso específico, como el de almacenamiento o planeación de demanda, por citar algunos ejemplos, puedan desarrollar su propio diagnóstico, y lo más importante, puedan plantear acciones concretas que se convierten en la planeación estratégica para llevar el proceso a un nivel superior.